La Defensoría del Pueblo dio a conocer que uno de cada tres niños se alimenta en comedores escolares o comunitarios, según un informe que presentó la Universidad Católica Argentina (UCA) sobre la situación de la infancia, está cifra llegó a un récord del 33%, que fue creciendo desde 2013 en adelante.

La población que asiste a alimentarse en comedores escolares o comunitarios aumentó un 4,5 % respecto del año pasado, por lo que ahora está en 33%, según un informe que presenta la Universidad Católica Argentina (UCA) sobre la situación de la infancia. El dato surge del informe anual de la UCA que indica que la población en comedores viene creciendo desde 2013 y en la última medición alcanzó su pico: el 33% de los chicos. Los números muestran que el acceso alimentario se mantiene en el orden del déficit. La inseguridad en esta área afecta al 17,5% de la población y el 8% presenta un déficit severo, lo que significa que casi uno de cada cinco chicos redujo su dieta de alimentos en los últimos 12 meses por problemas económicos y el 8% dijo haber pasado hambre.
En este contexto el Ombudsman Provincial, José Leonardo Gialluca, señalo como oportuna inclusiva y humanitaria la decisión del Gobierno Provincial, al inaugurarse la Escuela Nº 1.335 de la gestión del Gobernador Gildo Insfrán, y en donde el mismo anunció que desde el 1º de julio aumentarán un 30% las partidas para comedores escolares con recursos propios en todo el territorio provincial. Se recordó que la semana pasada el Organismo de la Constitución, reclamó al Ministro de Educación de Nación, Dr. Alejandro Finocchiaro que revea el rechazo en cuanto a no actualizar el valor del servicio nutricional escolar, toda vez que los montos que se remiten a nuestra jurisdicción datan del año 2016 y nadie puede hoy sostener comedores escolares dignos con esas sumas de dinero, puesto que todos los alimentos se han incrementado en los últimos dos años y medio en porcentajes irracionales encontrándolos hoy a valor dólar y continúan aumentando porque el Gobierno Nacional así lo permite. Gialluca denunció que cada día más cae el consumo de los hogares de ingresos bajos y los salarios no pueden afrontar las demandas de necesidades básicas y como ejemplo ponemos que una familia necesita de unos $17.089 por mes para no ser pobre en tanto que para evitar la indigencia se necesita de un ingreso de $7.215,8. Por ello es que no nos cansaremos de demandar la intervención urgente y real del Gobierno Nacional en la implementación de políticas públicas que determinen un precio razonable y accesible de los alimentos. No es posible que en Formosa el precio del litro de la nafta ronde los $38 y el litro de gasoil los $34 y si domésticamente pretendemos acceder a una pasta dental de 180 gramos tenemos que pensar en pagar uno $80 y si se quieren adquirir un pack de 3 unidades de jabones, se tiene que pensar en $66,50 sumándole algún champú, los que rondan entre los $70 y arriba de los $100. Esos valores son desmedidos y por ello es que la calidad de vida disminuye progresivamente. Institucionalmente señalo el Ombudsman Provincial, que el Gobierno Nacional no puede dejar solos a los sectores más desprotegidos de la sociedad y decimos esto porque la UCA ha determinado recientemente que la pobreza alcanza casi la mitad de los niños y que el 48,1% desayuna, almuerza y merienda en comedores escolares o en organizaciones barriales y eso significa que económicamente el país se encuentra mal, con ingresos bajos, con una inflación descontrolada, que lleva a que ciertos estados provinciales, entre los que se encuentra Formosa, tejan una red de protección con recursos propios, allí donde el Gobierno Nacional se ausenta y por eso resaltamos que se asegure la comida y los medicamentos a nuestros niños que son el futuro.