Consideraron que en los últimos años se ha puesto en riesgo por parte del Gobierno Nacional la efectiva reivindicación de la Soberanía Nacional sobre los territorios del Atlántico Sur que pertenecen a la Argentina.
El Ombudsman Provincial José Leonardo Gialluca denunció que existen marcados retrocesos en esta materia y el Estado Nacional pretende hacerle creer a la gente que algunas obligaciones que le corresponden cumplir al Reino Unido con respecto a la Argentina acerca de la cuestión Malvinas, “no son motivadas por el ineludible cumplimiento de leyes internacionales muy específicas, sino por la buena voluntad de Inglaterra”. Por ello se ofende a todo el pueblo de la Argentina que el Gobierno Nacional haya utilizado la identificación de los soldados en el cementerio de Darwin, como una acción con un valor transaccional. Es decir que Gran Bretaña al facilitar supuestamente esta acción que se enmarca estrictamente en el Derecho Internacional Humanitario, la Argentina se obliga a otorgarles beneficios a los Británicos en materia de hidrocarburos, de vuelos, de pesca y de cooperación científica y militar. Pero en el día de hoy y sin dejar de denunciar las erráticas políticas del Estado Nacional, nos debemos abocar en primer termino al reconocimiento hacia todos los que combatieron en ese enfrentamiento y también para con todos los familiares que desde el año 2.012 vienen pidiendo a la Cruz Roja que colaborara con la identificación de los caídos en Malvinas. Por ello es que el Gobierno Nacional no tiene derecho a elegir si sigue o no con la defensa de nuestra soberanía sobre las Islas Malvinas y del Atlántico Sur, pues es mas que evidente que el Poder Ejecutivo Nacional en estos momentos está dejando de lado la defensa y la política de estado plasmada en nuestra propia constitución nacional. Desde la Defensoría del Pueblo en nombre de todos los que combatieron heroicamente, de quienes perdieron sus vidas, de los familiares queremos poner en relieve y visibilizar a un verdadero héroe nacido el 3 de febrero de 1.962, quien con 18 años de edad y siendo analfabeto por sus acciones de combate durante la batalla -Cerro Dos Hermanas-, en la Guerra de Malvinas, el Soldado Conscripto Oscar Ismael Poltronieri, quien era operador de una ametralladora, desoyendo la orden de retirada y quedándose combatiendo él solo, permitió el repliegue de todos sus compañero (más de 100 soldados incluidos sus superiores) a zonas seguras y disparando al enemigo con su única boca de fuego, impidió avanzar a todo el dispositivo ofensivo británico durante más de 10 horas. Recibió la medalla, “La Cruz de la Nación Argentina al Heroico combate” y es el único soldado conscripto “vivo” desde el siglo XIX hasta ahora en recibir la máxima condecoración que da nuestra nación. Luego de la guerra intentó suicidarse, vendió baratijas en los colectivos y trabajo de remisero. Pero lo mas importante fue que soldados y oficiales veteranos ingleses lo buscaron para expresar su admiración por él y fue condecorado en Inglaterra con “La Cruz de Hierro al Valor”. En los colegios de nuestro país los alumnos no lo conocen, no saben quién es. Por los centenares de Poltronieris que lucharon en desventaja pero con gran valentía en la Guerra de Malvinas, no podemos como Nación dejar de lado el reclamo que históricamente sostiene la República Argentina sobre esa parte de nuestro territorio y nunca favorecer a los intereses británicos en avanzar en la explotación de nuestros recursos y en otra posible fase que ya se vislumbra y que es su intención de proyectarse hacia la Antártida Argentina.