El Observatorio de Violencia de Genero creado por Resolución 289/15 en el seno de la Defensoria de la Provincia, y con motivo de celebrarse en el día de la fecha el Dia Internacional de la Mujer, dictó la Resolución Nº 57/18, mediante la cual se dio inicio a la “Campaña de la Concientización de la Violencia de Genero en el Noviazgo Adolescente”, que durante todo el presente año a través de talleres, proyección de películas, obras de arte y otras acciones, conjuntamente con el Ministerio de Cultura y Educación, el Municipio de la Ciudad, la Universidad Nacional de Formosa, Universidades Privadas y la Subsecretaria de Derechos Humanos, la Federación de Centros de Estudiantes Secundarios e Iglesias de nuestro medio, abordaran esta temática a fin de poder empoderar a los adolescentes y así prevenir, impedir y neutralizar cualquier clase de violencia durante el noviazgo, desde su inicio evitando el aumento de la gravedad de la violencia ejercida o detener su progresión hacia la vida adulta.
El Ombudsman Provincial, José Leonardo Gialluca, afirmo que las situaciones de maltrato y violencia más habituales y extendidas en parejas de adolescentes y jóvenes están relacionadas con la manifestación de los celos y el ejercicio del control. Se ponen en evidencia y son potenciados por la utilización de las tecnologías de comunicación, como celulares, computadoras, tablets. La violencia (física, sexual y/o emocional) en el noviazgo son todas aquellas modalidades de vinculación dentro de parejas adolescentes que implican abuso de poder, la instalación paulatina de maniobras de dominación sobre la otra persona y, consecuentemente, la restricción de derechos y la producción de daños para quien las padece. Se puede dar en persona o vía tecnologías de comunicación. El problema de la violencia hacia las mujeres se origina en la histórica discriminación que padecen éstas en las sociedades que avalan prácticas basadas en la inequidad entre mujeres y varones. Nuestra sociedad actual todavía transmite concepciones que favorecen una organización familiar autoritaria y verticalista desde la cual se genera desigualdad en cuanto a los derechos de sus miembros de acuerdo con el género. En familias con roles estereotipados se replican posiciones asimétricas en la pareja y se transmiten creencias en torno al amor tales como la entrega incondicional, dar sin pedir nada a cambio, perdonarlo todo, etc. La proveniencia de hogares donde se han vivenciado patrones abusivos de vinculación, sumado al inicio de las primeras vivencias de vínculos amorosos teñidos de romanticismo e idealismo, puede encontrar a jóvenes con menos recursos personales para protegerse de relaciones que los someten a perjuicios para su autoestima y salud. El riesgo de violencia aumenta con: consumo de alcohol y/o sustancias peligrosas, padecer enfermedades discapacitantes, no tener una red social de contención (amigos, familia, etc.). En lo que respecta a las señales de alerta, los adolescentes consideran las agresiones de sus parejas como una broma o como un juego que a veces puede «irse de las manos» o como respuestas «normales» ante malentendidos, pueden confundir los reclamos, los celos, las exigencias de mantener relaciones sexuales, la invasión en su intimidad, el control de sus actividades y relaciones con una muestra de interés por parte de sus parejas. Todo ello se previene con campañas como estas y con el acompañamiento de la familia, la escuela y el colegio que aportan a la sensibilización sobre esta problemática, promoviendo la desnaturalización de los pilares socioculturales de la desigualdad en los vínculos. Son ámbitos donde se pueden brindar condiciones para que se genere con confianza un diálogo donde el adolescente sienta que puede ser escuchado sin juzgamientos, que reciba información sobre todas aquellas maniobras sutiles que limitan en el día a día, sus posibilidades de crecimiento y autonomía; y, que se lo oriente y acompañe en relación a los riesgos que le puede ocasionar el sostener un vínculo de este tipo.
¿Qué es un noviazgo violento?:es cuando tu novio, amigovio o compañero no respeta tus derechos como mujer. Se manifiesta de diferentes formas: un empujón, un insulto, una cachetada, burlas, etc. No debemos quitarle importancia a estas situaciones cuando pasan. Así: – Cuestiona a todos tus amigos, lo que haces, la ropa que usas, lo que decís.- Te llama a cada rato. Quiere saber con quién estás.- Te sentís obligada a dar explicaciones todo el tiempo.- Te cuidás de decir todo lo que sentís. Te resulta difícil decir no. ¡Cuidado! Los celos excesivos buscan controlar parte de tu vida, pero los podés confundir con «muestras excesivas de cariño».
Las reacciones violentas empiezan de a poco y suelen empeorar, aunque por momentos se atraviesan etapas más tranquilas. Cuando se le pasa el enojo, te pide disculpas. No esperes a que se ponga peor. Es importante que no dejes que tome decisiones por vos, no permitas que te diga qué hacer o decir, no permitas que te rete, te insulte, te grite o te hable con prepotencia, no te humille ante otros, no te alejes de tus familiares o amigos, no dejes que te amenace, que te empuje, agreda o golpee, no permitas que te obligue a mantener relaciones sexuales si no querés. Todas estas situaciones constituyen violencia y se da en las parejas jóvenes y por ello Institucionalmente durante todo el presente año se llevaran a cabo interinstitucionalmente medidas para la prevención y el conocimiento de las conductas agresivas y se elaboraran estadísticas al respecto las que serán recopiladas anualmente.