La -Dirección de Derechos del Consumidor, Usuario y Contribuyentes, Relaciones de Consumo-, de la Defensoría del Pueblo de la Provincia de Formosa, informo ante el gran número de usuarios del servicio de energía eléctrica, que acuden al Organismo de la Constitución, en estos días “denunciando supuestas sobrefacturaciones en las boletas de energía eléctrica, o que les llega – el doble de lo que pagaron con anterioridad y otras quejas al respecto”; que en primer término necesariamente se hace necesario resaltar que el valor del kw no ha sufrido ningún aumento en todo lo que va del 2015, en virtud de que el Estado Provincial suscribió para todo este año conjuntamente con el Gobierno Nacional al igual que otras provincias, un “Acuerdo de Congelamiento de Tarifas”.

Por otro lado se pidió a los consumidores que lean atentamente sus facturas ya que ahora están haciendo frente al primero y segundo bimestre del 2015 “donde se incluyen los altos consumos de los meses de enero y febrero”. Esto es, si comparamos las facturas que nos llegan al Organismo de la Constitución de una familia tipo, vemos que en un periodo del 10 de diciembre al 10 de febrero del año 2.014 consumió 2.500 kv y a igual periodo del 2.015 se aprecia 3.700 kv lo que obviamente produce un aumento en el valor total que se debe pagar.

Por otra parte el Ombudsman Provincial, señalo que son decenas de usuarios que acuden a manifestar “que como consecuencia del cambio de medidores realizados por REFSA, se les ha incrementado el consumo de energía en sus domicilios”. En esto hay que ser preciso y objetivo en cuanto a que la prestataria viene con un plan de cambio de medidores obsoletos que poseen entre 15 a 20 años de antigüedad y que si en una familia tipo bimestralmente “viene un consumo de 300kv o 400kv, es casi seguro que no esté registrando el consumo real, ya que haciendo un uso racional de energía una familia tipo en Formosa tiene como mínimo un consumo de 1000 kv aproximadamente o más”. La explicación técnica a esto, es que esos viejos medidores funcionaban con -piezas mecánicas -que han sufrido desgastes y no venían registrando el consumo real, por lo que al colocarse los nuevos medidores “no es que midan energía de mas, como se cree”, sino que únicamente lo que sucede es que están dando una lectura real de la energía consumida.

En estos casos, no hay ningún error de lectura y lo que pedimos para tranquilidad del vecino, es “un contraste de medidor” que consiste en un control técnico del mismo para conocer si está funcionando dentro de los parámetros normales, cada uno de los medidores. En todos estos casos, estamos hablando de la inexistencia “de puentes clandestinos o de arreglos ilegales de medidores que detectados producen el inmediato procedimiento conjuntamente con el EROSP -de energía consumida y no facturada-, mas las multas correspondientes, lo que hace que el monto a pagar por el usuario sea sumamente elevado, pero aquí estamos frente a un delito “que es el hurto de energía”.

Ante este contexto el Ombudsman Provincial, solicito a todos los usuarios que tengan inconvenientes a que concurran a la sede de la Defensoría del Pueblo tanto en horario matutino como vespertino donde serán debidamente asesorados en forma gratuita. Por otro parte consultado acerca del actual funcionamiento del Sistema Energético Provincial, el funcionario señalo que los reclamos y denuncias por cortes, inestabilidad en la tensión y otros han disminuido notoriamente en relación a la época en que el servicio estaba en manos privadas y al mismo tiempo realizo una comparación en lo que respecta a las tarifas que pagamos actualmente, señalando que en provincias vecinas se han autorizado incrementos de precios sustanciales, circunstancia esta que no se da en Formosa y por ello sintetizo que “mas allá de que la empresa sea estatal o privada, lo que hoy valoramos es la mejor calidad en la prestación del servicio que brinda tanto en capital, como en los más alejados parajes de nuestro oeste provincial, cuando podemos observar que las prestatarias de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires no pueden con las temperaturas más bajas que las nuestras, y ello evidentemente se debe a una deficiente gestión que no ha contemplado el aumento del consumo y tampoco otras variables técnicas o de inversión, para brindar un servicio público dentro de estándares aceptables.