Desde el Observatorio de Violencia de Género que funciona en la sede de la Defensoría del Pueblo, su Secretaria General, Dra. Mariela Cáceres, considero que el Proyecto de Ley que se impulsa en nuestra Legislatura Provincial sobre implementar en forma gratuita el botón antipanico, en primer término no es oportuno y por otro lado, sin llegar a ser una medida negativa, siempre que se pide el botón antipanico, el mismo debe ser acompañado con otras medidas a favor de las víctimas de violencia de género, sino de lo contrario, no estamos proponiendo una solución de fondo, sino meramente parcialista.
Esta probado en algunas provincias, que el botón antipanico, no sirve si es una herramienta aislada, ya que requiere de presupuestos acordes, se debe trabajar de manera articulada con el 911, se debe contar con personal capacitado a la hora de atender a una víctima para que se le pueda brindar contención y posibilitarle la inclusión social a futuro. Porque muchas veces hay mujeres que no se animan a llevar a cabo una denuncia y soportan cualquier tipo de maltrato, ya que no tienen un trabajo digno ni una vivienda, y precisan un acompañamiento integral.
Por otro lado se señalo que el dispositivo antipánico debe contar con conexiónes directas al sistema coordinado de Atención Telefónica de Emergencia 911, adoptando la tecnología necesaria para que el mismo anexe a su red de monitoreo de sistemas de alerta la detección del geoposicionamiento de la víctima al momento de ponerlo en funcionamiento, por esto la victima de agresión debe tener su domicilio dentro del radio de acción del Sistema Coordinado de Atención Telefónica de Emergencia 911, entre otras observaciones; ya que de lo contrario los botones antipáticos no funcionaran en nuestro medio.
En lo que respecta a nuestra provincia, el Observatorio de Violencia de Género de la Defensoría del Pueblo, se encuentra abocado a obtener cuanto antes un “Albergue para Victimas de Violencia de Género”, lo que es considerado por los especialistas en la materia, algo prioritario al botón antipánico al momento de implementar medidas que produzcan un real beneficio a todas las víctimas, no debiendo ninguna de ellas, constituirse en herramientas aisladas como el Proyecto de Ley de Implementación del botón antipánico que se pretende.