Desde el último aumento del 1,5% en los combustibles de YPF y a la cual, le siguieron las petroleras SHELL, PETROBRAS y AXION, constituyéndose en el cuarto incremento que se reconoce en el año y ahora los precios prácticamente se equiparan a los valores que registraban previo a la rebaja del 5% que se aplicó en enero del 2015.

Señalaron desde la Defensoría del Pueblo “que el aumento en las naftas, es absolutamente injustificado y el Ombudsman Provincial, advirtió que esta medida provocara incrementos nuevamente en los precios de la Canasta Básica de Alimentos”; en febrero, marzo y abril ya habían subido en promedio casi un 1% cada mes. La mayoría de los consumidores no se quejan porque no se nota tanto la suba, ya que se incrementan alrededor de 10 centavos el litro y no cambia demasiado. Pero en cambio, la disconformidad sí se nota, entre quienes cargan combustible regularmente para llevar a cabo distintas actividades.

De un rápido relevamiento realizado por el Organismo de la Constitución, quienes más notan el incremento en los combustibles son las personas que necesitan de este insumo para trabajar y deben cargar nafta, gasoil o gas varias veces por semana, entre ellos se encuentran los remises, taxis , transportes de puerta a puerta, taxifleteros, y otros que despliegan diariamente actividades donde el combustible incide fuertemente en las estructuras de costos, ya sea del valor de los productos o servicios que ofrecen.

Por último se señalo que este cuarto aumento suma un incremento promedio del 4,2%, lo que posiciona a los combustibles casi al mismo precio que en diciembre del 2014.