Se señaló desde la Defensoría del Pueblo que en esta Navidad los fuegos artificiales sonoros, disminuyeron en gran medida, en relación al año pasado. Quizás la toma de conciencia del daño a niños con espectro autista y a personas con distintas enfermedades, animales, etc. dan como resultado que tan solo aquellos productos de baja intensidad sonora o los lumínicos sean los más buscados por los consumidores.
El Ombudsman Provincial Dr. José Leonardo Gialluca conjuntamente con los TGD Padres TEA y Asociaciones Protectoras de Animales, solicitaron expresamente y de manera urgente al Director de Bromatología Guillermo Gómez Achón a que intensifique los controles en los lugares de venta clandestina ya que cualquier vecino tuvo en su cuadra y en determinados barrios, “lugares armados de venta de pirotecnia sonora, muchos de estos sitios se viralizaron por las redes sociales e hicieron gala de la falta de control por parte del Municipio y todo ello constituye un cachetazo para quienes estamos trabajando todo el año para resguardar la integridad psicofísica de los niños con espectro autista, adultos mayores y animales”.
Si tenemos en cuenta que las campañas contra la pirotecnia sonora tienen ya varios años y cada vez más adhesiones, lo que se comprueba por la progresiva disminución de heridos en los centros médicos de la ciudad; en este año en la ciudad de Formosa, no se registraron heridos por pirotecnia; lo cual ya es un gran logro, pero aun falta mucho por hacer. Desde la Cámara Argentina de Empresas de Fuegos Artificiales se proyectó que se iba a vender entre el 15 y el 50% menos pirotecnia que en la Navidad pasada, y así fue en la realidad. Entonces en Formosa algunas razones para que esto suceda tienen que ver con las campañas que se vienen llevando a cabo en distintas partes de la provincia, por muchas Organizaciones, además de los mensajes en redes sociales que han logrado visibilizar el daño que causa la pirotecnia sonora abusiva. Gialluca consideró que este debería ser el último año que en nuestra ciudad capital no tengamos una normativa que prohíba todo lo relacionado con la pirotecnia, no solamente en estas fechas, sino también para los espectáculos deportivos, religiosos, políticos, artísticos, etc. Nuestra sociedad ha madurado y lo seguirá haciendo, falta ahora que lo hagan nuestros Representantes en los distintos estamentos de poder y para ello, no debemos bajar los brazos, por esto insistimos que en año nuevo el municipio controle todos aquellos lugares donde se vendió pirotecnia sonora en forma clandestina y que los conoce perfectamente y que en el uso de su Poder de Policia, proceda al secuestro de la pirotecnia, pues los únicos comercios autorizados son los habilitados legalmente y ellos se cuentan con los dedos de las manos.