La Defensoría del Pueblo de la Provincia, por medio de su -Dirección de Defensa de los Derechos de los Usuarios, Consumidores, Contribuyentes y Relaciones de Consumo-, conocidos los datos del Índice de Precios al Consumidor (IPC) publicados por el INDEC, el cual da cuenta que la inflación acumulada para éste año ha alcanzado porcentuales asimilables al 2002 (41%), dirigió una formal Actuación al Ministro de Economía de la Nación, Nicolás Dujovne a efectos de que contemplen en el ejercicio de su función la concreción de políticas protectorias de los derechos de los usuarios y consumidores; de modo tal que los mismos puedan acceder a los productos esenciales como alimentos y medicamentos.

La instancia remarca que la suba de las naftas y la abrupta devaluación de los últimos meses han impulsado los precios en todos los rubros. Siendo de ingenuos el pensar, a la manera que lo expresan desde el Gobierno Nacional, que el mercado mostrará su rostro humanitario en la crisis. El Ombudsman Provincial, José Leonardo Gialluca, remarcó que a los concentrados grupos económicos, a quienes manejan los grandes capitales, sólo les interesa la rentabilidad y lo que se está haciendo mal es dejar a los sectores más débiles desprotegidos en la relación de consumo, cuales son los usuarios y consumidores, frente a grandes empresas, como las petroleras, la estatal que monopoliza la electricidad, las alimenticias que sabido es que son cinco o seis compañías que manejan la comercialización de aproximadamente un 85% de los productos que integran la canasta familiar y debemos sumar también a los grandes laboratorios nacionales y extranjeros. ¿Qué margen de negociación puede tener un usuario o consumidor en éstos casos?. Por ello es el Estado el que debe salir a equilibrar la inclinada balanza, puesto que los sectores económicamente menos pudientes hace tiempo han dejado de llegar a fin de mes y ya no soportan tanta carga. Quienes conducen los destinos del país, afirmó finalmente el funcionario, deben percatarse que la situación es cercana a la vivida en otros tiempos, en los que se desató una verdadera debacle política, económica, financiera y cambiaria. Es preciso que se dejen de aplicar recetas ultra liberales que no dieron resultados, toda vez que fue necesario salir de una crisis. Ésta Actuación, finalizó diciendo, busca que el Gobierno Nacional se muestre más activo en atender las necesidades de los sectores socialmente más vulnerables del país, antes que las inspecciones del FMI, que ahora incluso tendrá oficina propia nada menos que en el Banco Central de la República Argentina, a fin de asegurarse la aplicación de políticas económicas más recesivas a las ya implementadas hasta el momento.-”