La -Dirección de Derechos del Consumidor, Usuario y Contribuyentes y Relaciones de Consumo- de la Defensoria del Pueblo, frente a los fuertes aumentos de la harina y del gas, como así también de la grasa y otros insumos indispensables que se utilizan para producir el pan, ha hecho que el precio llegara a $40 el kg en la ciudad de Formosa en las panaderías del centro, en las de barrio a $30 y $35 y en los supermercados se comercializa entre $29,90 cuando el mes pasado se vendía a $26 y así sucesivamente.


El Ombudsman Provincial, José Leonardo Gialluca, señaló que luego de un relevamiento llevado a cabo en distintos puntos de venta de nuestro mercado local, “la mayoría de los propietarios y responsables de panaderías denunciaron que la semana pasada la bolsa de harina de 50 kg la compraban a $500, esta semana la obtiene a $520 y ya están notificados de que la próxima semana la misma superara los $600 con lo cual aseguraron que el precio del pan continuara subiendo lamentablemente. Agregaron que desde ya vemos con preocupación la situación, siempre queremos tener una mirada optimista pero lamentablemente no es fácil sobrellevar las cosas que están fuera de nuestro alcance. En nuestro sector, la renta ha ido decreciendo y seguimos siendo prudentes con los precios porque también sabemos la difícil situación del consumidor y tratamos de balancear los costos y precios de venta para establecer un equilibrio.
El sector de los panaderos agregó que también, en mayo se vienen incrementos salariales para los trabajadores y que en los primeros días de ese mes se definirán los aumentos correspondientes y nosotros casi la mayoría somos empresas familiares y si tenemos un dependiente éste esta cobrando por encima de los $15.000 actualmente, lo cual pagar impuestos, las altas tarifas de energía electrica, el gas y la inflación que no cede, no nos deja otra alternativa que aumentar el precio de este producto.
Consultado los mismos si han bajado las ventas, todos coincidieron en que se vende muy poco, casi nada de lo que son facturas y otras especialidades y que la mayoría de los consumidores compran por $20 o $30 de pan y casi nunca se lleva lo que antes pedían.