Desde la -Dirección de Salud y Vivienda- de la Defensoría del Pueblo de la Provincia de Formosa, a través de la Actuación Nº 358/16, se solicito con suma urgencia y preferente despacho al Ministerio de Desarrollo Humano, que proceda a adoptar todas las medidas pertinentes a fin de solucionar los distintos inconvenientes denunciados por vecinos de distintos barrios de esta ciudad, que han acudido al Centro de Salud del Barrio 2 de Abril, y que conforme constancias que obran en el Organismo de la Constitución, “o no encuentran profesionales que los atiendan o faltan medicamentos o instrumentos médicos necesarios, a lo que se le suma la deficiente infraestructura del edificio”.

El Ombudsman Provincial, Dr. José Leonardo Gialluca, resalto que en casos de urgencias los vecinos han manifestado que cansados del maltrato y mala atención con la cual son atendidos, directamente, en casos de urgencias se dirigen al Centro de Salud del Bº Itati o a cualquier otro Centro de Salud más próximo, “ pues ya conocen de antemano el tipo de atención deficiente que van a recibir, denunciando también que todo ello les genera más gastos y por ello piden la intervención de este Organismo de la Constitución” .

La gota que habría colmado el vaso, en lo que respecta a la gran paciencia de los vecinos, en definitiva fue lo que sucedió el pasado 04 de febrero del corriente año donde una ciudadana- madre de una criatura de 4 años de edad acudió al Centro de Salud del Bº 2 de Abril, donde enfermeras que se encontraban en el lugar le negaron la atención por “falta de elementos, instrumentos y médicos, frente a la desesperante situación que estaba viviendo pues la niña se había atorado con un caramelo masticable, de donde la llevo a la Clínica Del Ángelo donde no fue atendida por falta de Obra Social, para terminar su lamentable derrotero en el Hospital de la Madre y el Niño donde se produjo el deceso de la menor”.

Desde la Defensoría del Pueblo se señalo que de acuerdo a la Declaración Universal de Derechos Humanos y el Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales, se reconoce la salud como derecho inalienable e inherente a todo ser humano. Esto implica la obligación del Estado de respetar, proteger y garantizar el derecho a la salud de todos sus ciudadanos, no sólo asegurando el acceso a la atención de salud, sino también la atención adecuada.