-Gialluca recordó que, tanto la CRA, FAA y la UIA entre otros sectores, hace poco tiempo rechazaron la apertura de importación de alimentos, considerando a la misma como “una medida triste y vergonzosa, ya que la Argentina tiene sus mayores ingresos por las exportaciones y alentar el ingreso de alimentos extranjeros, atentará contra las Economías Regionales y la Industria Nacional, ya que competirán de una forma desventajosa”
Frente a la inflación, el Gobierno Nacional anunció la apertura total de importaciones de alimentos y medicamentos, luego de la reunión del Ministro de Economía Luis Caputo con los supermercadistas. De esta manera, el BCRA reducirá el plazo de pago de importaciones de alimentos, bebidas y productos de limpieza, cuidado e higiene personal: pasarán de un esquema de pago en 4 cuotas a los 30, 60, 90 y 120 días a un plazo de pago en una sola cuota a los 30 días. * Se determinó suspender, por el plazo de 120 días, el cobro de la percepción de IVA adicional e impuesto a las ganancias a las importaciones de estos productos y de los medicamentos. * Esta medida alentará la importación de productos de la canasta básica, cuyo precio en el mercado local sea superior al precio internacional, lo que contribuirá a una mayor competencia y en consecuencia, a una caída en la inflación y en el nivel de precio de estos productos. * Entre los principales productos beneficiados se encuentran: banana, papas, carne de cerdo, café, atún, productos de cacao, insecticidas, shampoos, pañales, entre muchos otros productos. El Defensor del Pueblo de la Provincia de Formosa, Dr. José Leonardo Gialluca, señaló que, acompañamos Institucionalmente esta decisión y esperamos que, en un corto plazo de tiempo, los productos de consumo masivo y los medicamentos, bajen realmente sus valores. El Funcionario Provincial denunció que, los supermercados vienen desde los años de la pandemia hasta la fecha, obteniendo ganancias extraordinarias, que los consumidores pagamos y eso nos convenció de la necesidad de hacer las peticiones formales correspondientes a la Cartera Económica Nacional.
Consultado sobre las publicidades engañosas del «2×1» o de «pagar a la mitad de precio la segunda unidad», señaló que las trampas más frecuentes son: * Ofertas 2X1 (pagás un producto y te llevás otro igual) o 3X2 (pagás dos y te llevás tres): Las empresas no informan cuánto está pagando realmente cada consumidor por cada producto. Entonces, el cliente piensa que está pagando más barato un producto incluido en esa promoción, pero puede pasar que otro artículo por fuera del descuento sea más barato. Por ejemplo: el fideo X está $500, la promoción dice que te llevás dos por ese precio, pero resulta que hay otro fideo similar que está $250, $250 menos por unidad que las de la promoción. Legalmente, los supermercados y las empresas están obligadas a informar claramente cuál es el precio por unidad, una vez que se aplica la oferta. Por otra parte, el consumidor debe confirmar que, al momento de pagar, se le efectuó el descuento. * Ofertas que rigen sólo para una compra. Tal es el caso de las ofertas donde se ofrece un 70 % en la segunda unidad del mismo producto. Sin embargo, no se aclara que, si el consumidor desea comprar cuatro artículos, el descuento se aplicará en los dos primeros. Es importante fijarse ese dato antes de realizar la compra. Por último, Gialluca recordó, “que estas medidas y propuestas de apertura a las importaciones de alimentos y medicamentos, fueron rechazadas hace poco tiempo por las Confederaciones Rurales Argentina (CRA), como así también por la Federación Agraria Argentina (FAA) y la propia Unión Industrial Argentina (UIA), por entenderse que el problema inflacionario no se remite a un producto o rama productiva en particular como los alimentos, sino que es un problema de raíz macroeconómica, afirmando estos sectores que, “en lugar de importar, deberíamos estar pensando en sembrar más, en producir más y exportar al mundo, pues si se alientan las importaciones, se está atentando contra las economías nacionales y regionales que van a competir de una forma desventajosa”. Por lo que esta apertura total de las importaciones de alimentos, se presenta como una medida de doble filo, que busca ofrecer un alivio inmediato a la inflación, pero que también podría tener implicancias en la producción local.