La Defensoría del Pueblo y la Fundación Unidos por el Dolor con Familiares de Víctimas en Siniestros Viales, rechazaron las actuales posturas del Presidente de COVIAR, de OVILAM y del Fondo Vitivinícola Argentino que se oponen a la Ley Alcohol Cero al Volante en Argentina-

El Defensor del Pueblo de la Provincia de Formosa, Dr. José Leonardo Gialluca, conjuntamente con Fundación Unidos por el Dolor con Familiares de Víctimas en Siniestros Viales representada por el Señor Alberto Gauna, rechazaron formalmente las posturas del Presidente de COVIAR (Corporación Vitivinícola Argentina) José Alberto Zuccardi, de la Empresa OVILAM (Observatorio Vial Latinoamericano) cuya Presidente la ejerce el Ing. Fabián Pons y del Gerente del Fondo Vitivinícola Sergio Villanueva, quienes se oponen a impulsar y aplicar en nuestro país el -Proyecto de Ley Alcohol Cero-, afirmando de que el mismo no va a solucionar nada y que la tolerancia cero, no solo es ilegal, sino que también técnicamente es impracticable y que además produciría un fuerte impacto negativo contra la Industria Vitivinícola, como también del sector gastronómico y enoturismo, por lo que, se han reunido con el Gobernador de Mendoza Rodolfo Suárez con el objetivo de proponer un proyecto alternativo que mantenga el límite actual de 0,5 gramos de alcohol por litro de sangre y solo se reduzca a cero en caso de principiantes y jóvenes de hasta 25 años. En las Actuaciones remitidas, se manifestó que la seguridad vial es una cuestión central de salud pública y afirmar que “pequeñas cantidades de alcohol no hacen nada”, es algo que ha quedado perimido, pues, la OMS señala que con la primera copa de alcohol ya empieza la afectación a nuestra capacidad y que con una graduación de 0,1 y 0,5 es tres veces más alto el riesgo de provocar un siniestro vial que un conductor sobrio. Obviamente que, la Ley de Alcohol Cero debe ir acompañada, no solamente de una fuerte educación vial y controles en las rutas y calles de cualquier lugar, “pero no es menos cierto que el sector privado (boliches, fiestas privadas autorizadas, eventos diversos y otros) no se suman a ninguna campaña para que la gente no maneje alcoholizada, es más su gran negocio es vender más bebidas alcohólicas y mezclas con energizantes a los jóvenes”. Se resaltó que los mensajes hacia la sociedad deben ser claros y sencillos, “no beber alcohol antes o durante la conducción”, puesto que, pretender determinar límites de 0,5 o de 0,8 gramos por litro de sangre para conducir, es nada más y nada menos que la gente conduzca en nuestro país alcoholizada y luego cuando se producen los siniestros viales fatales o con lesiones graves, las consecuencias son irreversibles. De acuerdo a la OMS, las muertes ocasionadas por siniestros viales a nivel mundial representan actualmente 1,35 millones por año. Casi la mitad de las personas fallecidas en siniestros de tránsito son peatones, ciclistas o motociclistas. En Argentina, según los datos de la Dirección de Estadísticas e Información de la Salud (DEIS), 3.534 personas fallecieron en 2019 a causa de lesiones en las que intervino un vehículo de transporte terrestre. De este total, casi el 80% corresponde a varones. Además, si bien los siniestros viales afectan a toda la población, la mortalidad por lesiones de tránsito incide mayormente en niños, niñas y personas jóvenes adultas. En esta línea, el Director Ejecutivo de la ANSV Pablo Martínez Carignano, afirmó que es inaceptable que mueran mil personas por año como consecuencia de personas alcoholizadas, agregando que circular con alcohol en sangre, por mínima que sea la cantidad consumida, aumenta tres veces las posibilidades de causar un siniestro vial y por ello la Comisión de Transporte del Congreso de la Nación no puede perder más tiempo en tratar este Proyecto clave para salvar vidas y evitar lesiones con discapacidades graves que son las consecuencias que traen aparejados los accidentes en que se detecta que las personas siniestradas tomaron alcohol.