Si los productores, frigoríficos o industriales de la carne proponen suspender las ventas, pediremos a los consumidores no comprar ningún corte vacuno, ni porcino. Se debe acordar precios razonables para los consumidores de nuestro mercado interno primero y luego facilitar las exportaciones-

La irracionalidad en el alza de precios de la carne vacuna en el mercado interno llevo al Gobierno Nacional a tomar la decisión de suspender por el término de 30 días la exportación de la misma. Desde la -Dirección de Usuarios, Consumidores y Relaciones de Consumo- de la Defensoria del Pueblo de la Provincia de Formosa, ya se había advertido de esta situación, tras un relevamiento que expuso claramente que tanto, la carne vacuna como las verduras, son los alimentos esenciales que más subieron en los últimos meses. Esto genera reacciones contrarias desde los sectores productivos, tanto de formosa como de todo el país y paralelamente, comenzó el paro del campo impulsado por la Mesa de Enlace que finalizará el 28 de este mes. Asimismo, los productores, frigoríficos e industriales de la carne, “proponen suspender las ventas por el plazo de 20 días y sumar también a los sectores de la producción de cerdos y de granos, por entender que no son responsables de los precios en las góndolas o carnicerías”. Según datos del Instituto de Promoción de Carne Vacuna Argentina (Ipcva) los precios de los distintos cortes de carne vacuna aumentaron 65,3% durante abril, con respecto a un año atrás, unos 20 puntos por encima de la inflación minorista anualizada hasta el primer cuatrimestre del presente año. Ante esta situación y con el único objetivo de que la carne vacuna se ofrezca a precios razonables para que de esta manera, pueda llegar a la mesa de todos los consumidores, desde el Organismo de la Constitución Provincial, se solicitó al Dr. Matías Sebastián Kulfas, Ministro de Desarrollo Productivo y al Ministro de Agricultura, Ganadería y Pesca, Ing. Luis Eugenio Basterra, “que se arbitren las medidas necesarias y espacios de diálogos a fin de reducir los costos en la cadena productiva de las carnes vacunas y porcinas”. Se fundamentó esta requisitoria en que se hace necesario y urgente que los consumidores tengamos acceso a cortes de carne vacuna a precios que estén al alcance del bolsillo de todos y que luego se facilite la exportación de cualquier excedente. Gialluca añadió que se habla mucho de que la carne que se exporta no es la que se consume localmente y que por allí las vaquillonas pueden ser compradas para comercializarlas en las carnicerías, “pero lo único real es que en los últimos años y actualmente el valor de la carne se ha tornado en algo inalcanzable de pagar para la gente”. No queremos que se pierdan mercados internacionales, ni que haya faltante de carne para el consumo o que desaparezcan los cortes subsidiados o que se produzcan pérdidas de puestos de trabajo y es por ello que todas estas cuestiones nos han motivado a sugerir que, las Autoridades Nacionales Competentes,  busquen la manera de reducir costos en la cadena productiva, de manera tal, que los consumidores podamos comprar sin problemas los diferentes cortes de carne vacuna y tener una buena alimentación dentro de una emergencia sanitaria muy grave y que los exportadores hagan sus negocios de la mejor manera posible, dejando de lado enfrentamientos que hoy no suman, cuando todos, Ciudadanos, el Estado Nacional y Provinciales, así como los sectores privados, están enfocados en salvar vidas que todos los días se pierden por el coronavirus de modo alarmante.

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