-Gialluca señalo que será la Justicia Penal Competente la que deslindará las responsabilidades frente a este aberrante hecho en la cual se llego a vejar la integridad psicofísica de una ciudadana formoseña-
A comienzos de semana, la Defensoría del Pueblo, recibió por intermedio de su Secretaría Letrada, una denuncia de dos personas mayores de sexo femenino, radicadas en esta ciudad capital quienes denunciaron que su madre, D.J.G., estaba virtualmente siendo retenida en la ciudad de Juan José Castelli, Chaco, por un hermano de ambas. La situación surgió a raíz de que la mujer, de 65 años de edad, fue a visitar a su hijo, con intenciones de residir un tiempo en la vecina provincia. Según relataron las denunciantes, su madre viajó hacia el Chaco, desde Ibarreta, luego de obtener un préstamo de $52.000, que a la llegada entregó íntegramente a su hijo a fin de que el mismo y su grupo familiar, integrado por esposa y dos hijos, pudieran acogerla en un lugar propio, pues se encontraban en un alquiler y con la suma aportada por la misma se podría terminar la construcción en un inmueble propiedad de la familia. Así las cosas, al momento de estallar la Pandemia, D.J.G. se encontraba en el interior de la vecina provincia en la que, paulatinamente, su hijo y su familia, le iban restringiendo, de manera paulatina, su libertad. En un primer momento le retuvieron su tarjeta de débito, las salidas le eran permitidas por brevísimos lapsos y la trasladaron a una habitación del fondo de la casa sin terminar, carente de luz eléctrica y agua potable. Con posterioridad con la excusa de proteger su salud no se le permitía el egreso del inmueble, no se le rindieron cuentas de sus ingresos por beneficios sociales durante los meses de mayo, junio, julio y agosto del corriente año. Merced a la poca comunicación que mantenía cuando podía tomar su teléfono, bajo estricta vigilancia, sus otros cuatro hijos, residentes en Formosa, pudieron conocer la situación por la que atravesaba la mujer, así como que, además de los abusos denunciados, era víctima de violencia verbal por parte de sus nietos, constantes amenazas a su integridad que incluso llegaron al extremo de la violencia física. Con conocimiento de tal situación, el Defensor del Pueblo, José Leonardo Gialluca, ordenó remitir una formal denuncia por medios electrónicos a la Justicia del Chaco, Fiscalía de Investigaciones Nº 2 de la 6ta. Circunscripción, a cargo de la Dra. Raquel Haydee Maldonado, con asiento en Castelli, quien se abocó de inmediato al conocimiento del caso y orden judicial mediante, fue allanado el domicilio donde se encontraba retenida la mujer, constándose las humillantes condiciones en que la misma vivía en el lugar y la intención de la misma de abandonarlo para regresar a Formosa con sus otros hijos. Con posterioridad, los extremos aludidos, fueron corroborados en la declaración que la víctima prestó ante la Fiscal de Investigaciones quien sustanciará las actuaciones judiciales correspondientes en el Fuero Penal Chaqueño. En lo que respecta a la mujer, según lo informó el Secretario Letrado de la Defensoría del Pueblo de Formosa, José Porfirio García, fue puesta en custodia en el Albergue Madre Teresa de Calcuta, a cargo de Cáritas Diocesana, en Juan José Castelli, donde aguardará que se realicen las gestiones por parte de familiares de Formosa y la Defensoría del Pueblo para que retorne, además de sus hijos, en la localidad de Ibarreta la aguarda su esposo de 80 años.
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