Los vecinos de la localidad de Comandante Fontana vienen desde hace años soportando consecuencias y efectos negativos en su salud y ambiente como consecuencia de que la Municipalidad del lugar posee dos vaciaderos donde permanentemente se arrojan desechos de distintas clases y además se produce a la quema de los mismos, encontrándose uno sobre la ruta provincial nº 25 frente al lote 20 y el otro frente a la EPET Nº 324, donde hay niños que están padeciendo asma, bronquitis, neumonía y todos tienen que soportar los olores nauseabundos que se producen, invasiones de moscas, insectos y alimañas que recrean un foco infeccioso que no se detiene.

Los denunciantes documentadamente acreditaron por ante la Defensoría del Pueblo que hace más de siete años han realizado denuncias por ante el Municipio y otros estamentos, logrando en un momento que se clausurara uno de ellos pero en la actualidad el mismo se ha vuelto a habilitar y se continúan con las descargas de residuos y quemazones.
Ante este contexto el Ombudsman Provincial, José Leonardo Gialluca, señalo que la presentación de fotos, historias clínicas y otras documentaciones, sumado a las manifestaciones de un centenar de vecinos , ha determinado que el Organismo de la Constitución solicite al actual Intendente Señor Juan Carlos Jaquemin a que clausure los basurales antes mencionados, se proceda a la limpieza de la zona y se reubiquen los antes citados en una zona alejada de la población, para lo cual se le sugirió pedir el asesoramiento técnico necesario al Ministerio de la Producción y Ambiente como así también a la Subsecretaria de Recursos Naturales, Ordenamiento y Calidad Ambiental a cargo del Dr. Hugo Bay. El Defensor del Pueblo señaló, “que esta es una gravísima situación que no es exclusiva del Municipio de Comandante Fontana, sino que se repite en todos aquellos que se encuentran sobre la Ruta Nacional Nº 81 donde hemos podido constatar que antes y después de cada localidad, a cielo abierto y sin ningún tratamiento se procede a arrojar irregularmente toda clase de residuos y ni hablemos de los contaminantes o peligrosos, los que deberían tener una disposición final que permita garantizar la salud de la población y el ambiente. Si bien todo ello demanda recursos, que en la actualidad son escasos, instamos a gestionar los programas existentes en esta materia, como ya se han hecho en otros municipios y que es necesario que en todo el territorio provincial, “la basura que genera la población, los comercios, mataderos y otras actividades sean depositadas en lugares seguros para evitar cualquier efecto negativo como el que se viene produciendo actualmente”.