La Defensoría del Pueblo denunció que en el último mes del año la inflación no dar tregua al bolsillo de los consumidores y usuarios del Norte Argentino y especialmente a los de Formosa.
El Ombudsman Provincial José Leonardo Gialluca señaló que la gestión del presidente Mauricio Macri, y específicamente los Ministros de Hacienda Nicolas Dujovne junto al de Finanzas Luis Caputo y la Secretaria de Comercio a cargo de Miguel Braun- que no entendemos porque depende del Ministerio de la Producción- “no logran frenar la inflación que para este mes se calcula que llegará a un 3%, con un anual por encima del 27 o 28% lo que sumado a los incrementos de los combustibles, de la energía eléctrica, del gas, agua, no permiten que millones de jubilados, pensionados, trabajadores en relación de dependencia con ingresos limitados, beneficiarios de la AUH y otros, -tengan acceso a los alimentos esenciales y menos aún a los medicamentos-“. Por ello desde el Organismo de la Constitución se reiteró a las Autoridades Federales antes mencionadas que, “implementen en forma urgente medidas económicas eficaces para que la gente pueda subsistir, ya que ante el festival de aumentos que no son progresivos, hace que los aumentos tarifarios sean más elevados en el NEA, y NOA, comparándolos con el resto del País; pero ese no es el único indicador, la inflación núcleo no puede ser contenida y estamos cerrando un año que exige al Gobierno Nacional, adopte medidas económicas adicionales a favor de los consumidores y usuarios para poder contener los precios de los alimentos, de los medicamentos y del transporte.” Gialluca denunció que el Banco Central presentó oficialmente el billete de mil pesos ($1.000), ahora la pregunta es, ¿Cuánto tiempo le puede durar ese papel de alta denominación en el bolsillo de un asalariado y dejemos de lado a todos aquellos que hoy todavía no pueden insertarse a un mercado laboral ni formal o informalmente, lo que directamente los convierte en unas parias y excluidos sociales ya que ese billete de mil pesos únicamente servirá para pagar parte de la factura de energía eléctrica, cuyos aumentos habilitó el Ministro de Energía y Minería Juan José Aranguren. Así las cosas, al aumentar el combustible, directamente se incrementan todos los productos de la canasta básica alimentaria y, “la cena de navidad este año se ha convertido en un verdadero lujo a la cual no más del 20% de los Argentinos podrán acceder a la misma como corresponde”.
De un relevamiento llevado a cabo por la Defensoría del Pueblo en los supermercados de nuestros medios arroja que los bienes que más aumentaron en los últimos días o fueron remarcados son las bebidas, las verduras, cebolla, huevos, aceite y obviamente hemos podido observar las, “ofertas o promociones son todas engañosas”. Por ello sugerimos desde esta Institución, “comprar lo esencial, puesto que estamos en una etapa económica y social de fuerte especulación y de descontrol de precios, por lo cual tendremos que esperar que en los meses de febrero y marzo en adelante se produzca ojalá un sinceramiento en el costo real de los alimentos y otros productos”. Por último, los consumidores podremos aceptar que la Argentina sea parte del G-20 o se patenten más vehículos; pero con esto no se lleva los alimentos a la mesa de los consumidores y tampoco se adquieren los medicamentos para adultos mayores o niños. Así entendemos y apoyamos lo que las amas de casas nos denuncian, en relación a que las remarcaciones de precios son una constante y ello hace que ningún ingreso de los consumidores de nuestra Provincia puedan ser lo suficientemente capaces de cubrir demandas esenciales y aquí es que Institucionalmente hemos pedido a las Autoridades Competentes Nacionales que instrumenten medidas para salir de esta grave realidad, ya que es más que evidente que no se puede estar de los lados del mostrador, “esto es o se beneficia y se gobierna para la gente o se implementan medidas económicas a favor del sector empresario, del financiero y de los supermercadistas, que están teniendo hoy ganancias sobredimensionadas a costa de la inacción y de la falta de fiscalización de la Secretaría de Comercio Nación y de la Cartera Económica Nacional”.-
Gialluca dijo también que los trabajadores nos sentimos traicionados y decepciondo de la CGT y de nuestros representantes gremiales, ya que este es el momento en que tienen que salir a defender los derechos económicos, sociales, de la salud y previsionales de todos los asalariados y no “aliarse con los poderes políticos y económicos que únicamente gobiernan para los importantes sectores de nuestro país y nunca a favor de las obreras y obreros o las Pymes que están desapareciendo día y día”.