Ante la reacción de los ciudadanos, por hechos de asaltos o entraderas violentas que se vienen sucediendo aisladamente y llamativamente en Formosa , el Defensor del Pueblo expreso que si bien estas no son situaciones de normalidad, tampoco debemos dejarnos llevar por quienes quieren instalar en nuestra Comunidad una visión de total inseguridad que no nos permite o permitirá , aunar esfuerzos entre la sociedad civil, las fuerzas de seguridad , la justicia y el Estado, para erradicar todo esta clase de acontecimientos. Si no reconocemos las diferentes situaciones en cuanto a seguridad ciudadana que se viven actualmente en nuestra provincia a diferencia de otros centros urbanos, no estamos encarando las cosas como corresponden.
Es por ello que en el día de ayer el Ombudsman Provincial, conjuntamente con el Representante de la Defensoría del Pueblo de Nación, Dr. Julio Néstor Santander, llevaron la molestia y demanda de los vecinos, al actual Jefe de la Policía de la Provincia, Crio. Ángel Insfran. En dicha ocasión se pudo conocer que todas las mujeres y hombres de la seguridad provincial, se encuentran abocados a estos hechos delictivos que repercuten negativamente por el “modus operandi” en toda nuestra sociedad y que junto con la tecnología actual con la que se cuenta, indudablemente tendremos algunas novedades sobre el particular.
Institucionalmente desde el Organismo de la Constitución se señaló que la convivencia y la seguridad, es la condición de libertad en la cual los ciudadanos podemos ejercer nuestros derechos, libertades y deberes sin sentirnos victimas de amenazas y así poder gozar de adecuadas condiciones de bienestar y tranquilidad. Por ello para enfrentar estos hechos se debe tener una visión de conjunto, donde las causas son un factor que se tienen que trabajar en forma paralela a sus efectos. Entendemos a las familias que han sido vulneradas en sus derechos más íntimos y para evitar que esto se repita, lo menos que se puede realizar es continuar trabajando, priorizando principalmente la prevención, con un accionar en donde todos podamos convivir pacíficamente, recuperar confianza en las Instituciones y estar atentos a los tiempos que vivimos, donde la exclusión social, la desigualdad y la falta de oportunidades, junto al consumo de alcohol y de sustancias peligrosas, alimentan el espiral delictivo y nadie quiere para Formosa, hechos o lugares donde la inseguridad se fortalezca.