Desde la Defensoría del Pueblo se advirtió que el fuerte aumento en las tarifas de energía eléctrica, en los útiles escolares, en los productos de la canasta básica alimentaria, transporte público, medicina prepaga, y ahora un nuevo incremento de un 8% en los combustibles, termina licuando cualquier tipo de aumentos escalonados en los salarios.
El Ombudsman Provincial, sostuvo que el precio del barril en el mercado interno lo estamos pagando los consumidores 70 dólares cuando en el mercado internacional está a menos de 30 y jamás hasta ahora se reviso esta medida que se tomo cuando el valor del petróleo estaba a 110 dólares el barril.
En este contexto, y a favor de los consumidores y usuarios, el Estado Nacional y Provinciales, deben en forma urgente, converger en una serie de medidas como la de conceder “una tarifa eléctrica diferenciada para el NEA, un Acuerdo que se sienta en el bolsillo de los consumidores con las no más de 15 empresas productoras de alimentos en la Argentina, consensuar además que los laboratorios cumplan con los consensos suscriptos y evitar el incremento de los combustibles pues todo ello se traslada a bienes y servicios que pagamos los consumidores y usuarios. Entretanto, los salarios pierden cada dia mas su poder adquisitivo y la desconfianza de los consumidores es cada vez mayor, “nada de lo que se dijo que bajaría, tuvo un descenso y eso lo podemos ver en la carne, en la leche, medicamentos, transporte y otros”.
Por ello es que pedimos una intervención y acciones del Estado Nacional para proteger a los usuarios y consumidores, frenar el desempleo y acordar planes a mediano plazo con los empresarios, pues el valor o precio que hoy tienen los productos están sobrevaluados y pecaremos de ingenuos si pensamos que se van a retrotraer, para esto lo que se debe buscar es que no se produzcan más alzas o incrementos de precios en forma permanente y especulativa, pues el bolsillo de los trabajadores y de los jubilados no aguantan la inflación que se viene produciendo en estos últimos dos meses y ni hablemos de las personas sin trabajo, por ello es que los Municipios o Comisiones de Fomento, cada día recaudan menos y también el sector privado ve caer el consumo drásticamente , pues a la gente “no le alcanza lo que gana para afrontar sus necesidades básicas esenciales y por esto vemos como los hospitales y centros de salud se colman cada día mas de ciudadanos que antes eran clientes de clínicas privadas y por otra parte todos vemos como el comercio clandestino o irregular crece desmedidamente a lo que se le suma que en provincias fronterizas terminamos adquiriendo una larga serie de productos en países extranjeros donde la presión tributaria es mucho menor”.