Dada la irresponsabilidad ciudadana al desatender el llamado a mantener limpias las casas, terrenos, construcciones abandonadas o no, e impedir que el mosquito Aedes aegypti se multiplique; el dengue afecta cada vez a más personas en nuestra provincia.

La propagación se acelera y, por lo tanto, el peligro de ser afectados por la enfermedad que puede llegar a ser mortal es algo que nadie puede ignorar. Solo, el Estado Provincial y los Municipales, no podrán detener su avance. Es necesario, por lo tanto, que la ciudadanía deponga su actitud de indiferencia y se ocupe de la situación. Las autoridades judiciales también deben empezar a aplicar penas severas a los que no colaboran en la lucha emprendida; y en este sentido, el Ombudsman Provincial Dr. José Leonardo Gialluca señaló que, cuanto antes el Honorable Consejo Deliberante deberá convertir en norma, el anteproyecto de ordenanza que establece un “Régimen Especial de limpieza y mantenimiento de inmuebles urbanos”, de manera tal que podamos denunciar penalmente en base al Art. 205 del CPA que reza “Será reprimido con prisión de seis meses a dos años, el que violare las medidas adoptadas por las autoridades competentes, para impedir la introducción o propagación de una epidemia”. Aquí el tipo penal tiene por objeto la sanción de aquellas acciones u omisiones dolosas mediante las cuales se puedan producir la introducción o propagación de una epidemia. No de cualquier forma, sino exclusivamente, a través de la violación de las normas impuestas por la Autoridad Competente. Es decir, “las irresponsabilidades de los vecinos que determinen un delito contra la salud pública, deben ser rápida y duramente castigadas, pues todos los habitantes de nuestra ciudad y provincia, tenemos derecho a que no se contamine el aire u origine condiciones propicias para la cría y propagación del Aedes aegypti, y quienes violen este derecho, no están ofendiendo a una sola persona o familia, sino que ofenden a toda la Comunidad, ya sea por acción como por omisión”. Gialluca señaló que, no podemos continuar con esas actitudes irresponsables y criminales. Los ciudadanos tienen que tener la convicción de que, si no cooperan, la próxima víctima fatal puede ser uno mismo, alguien de la familia o personas del vecindario. Cada quién tiene que estar convencido de la necesidad de eliminar los focos de posibles criaderos de mosquitos y de que, si no lo hacen, la situación se va a ir agravando cada vez más. A esta altura de los acontecimientos, ya tendríamos que haber aprendido sobre el particular. Llevamos varios años sufriendo esta amenaza que se repite, ya se han enfermado y han muerto muchas personas, pero todavía no hemos adquirido la conciencia suficiente para mantener limpios nuestros ambientes y evitar que se formen criaderos del mosquito Aedes aegypti, transmisor del dengue, al igual que chikungunya, zika y fiebre amarilla. Son lamentables las historias de vecinos que se niegan a que funcionarios o voluntarios encargados de limpieza y fumigación ingresen a sus domicilios a verificar si existen criaderos. No hay que llegar al punto de que otras personas tengan que entrar por la fuerza, con orden judicial, a realizar las limpiezas de nuestras casas que nosotros no hacemos. Es muy triste que tengamos que esperar que enferme gravemente o incluso fallezca un familiar para que entendamos la importancia de contribuir a la limpieza. Debemos romper la pasividad, adquirir una mejor conciencia, interpelar a quienes mantienen lugares sucios en el vecindario, enseñar con el ejemplo de mantener un entorno limpio; y para ello, desde la Defensoría del Pueblo pedimos a todos los vecinos de cualquier punto de la provincia, “que anónimamente señalen los lugares que puedan ser posibles criaderos o de propagación del Aedes Aegypti y sus responsables o propietarios, a los teléfonos 0370 – 4436379 – 4436320 – 0800 444 1770 y/o vía correo electrónico denuncia@formosa.gov.ar – depuefor@fibertel.com.ar, los cuales serán posteriormente denunciados”.